"Nadie puede decir que está enfermo por el simple hecho de no ser feliz" esta afirmación da a respirar en un mundo científico cuadriculado y una sociedad, tan llena de imposturas, pero por sobre todo, por como esta investigadora identifica la feminidad, el cuerpo y su control. Nombra las alteraciones desde la historia y el análisis profundo de las interacciones sociales. Algo que pocas veces se testimonia en una sociedad tan bipolar que huye de verse a sí misma clasificando el mundo en felices, buenos o trastornados sin ofrecerles más salida que una etiqueta reprobatoria o plausible. La entrevistada va más allá para llegar a elucidar las perversiones, única forma, eso sí, para lograr a cambiar el rumbo de un trastorno sea alimentario, o el que sea. Se apoya en la lectura y en trabajar ..................
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