Hasta la misma industria, los capitales financieros, los gobiernos, no pueden rompernos más el cuerpo de lo que está. Es dificil hacerse a sí misma/o, sin embargo no hay mayor acto de libertad sino es sobre el propio cuerpo. Infinidad de estupideces se desatan en la interacción sobre el otro y la otra, con medidas y clasificacioenes sobre el cuerpo, desde que a finales siglo XX se convirtiera en una auténtica estantería de la neoliberalidad. Hoy la cosa no da más. Proliferan clínicas para bulimia y anorexia, las depres saltan al menor descuido, la presión social ha rebalsado y los primeros síntomas de explosión de la liberación comienzan a saltar. Mirad este artículo de la talla 48 y...
*El País
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http://www.elpais.com/articulo/sociedad/belleza/talla/48/elpepusoc/20100216elpepisoc_1/Tes
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