El término predominancia resulta el más ajustado como Heritier lo incluye en su entrevista. Al analizarlo, descomponerlo vemos con claridad : pre-dominancia porque es así de apriorística y no de otra forma la atribución masculina de la dominación, en lo arcaico o lo nuevo. Tal fijación obstruye la circulación de capacidades y acciones inclinándolas siempre sobre el hombre, de tal modo que por eso esta autora menciona la dominancia dentro de la predominancia. Se ha llegado a naturalizar de tal manera, que hacen falta no sólo siglos, sino que los hombres se copernequicen, puedan con lo cual llegar a amar, más que a necesitar, como escuchar a una mujer sin fosilizarla y atraparla en sus construcciones. Lo mejor que les resultaría: recuperar la humildad de sus formas, mostrarse, crearse a sí mismos más que a nosotras (por ende ser menos neuróticos y más honestos). Se desmontarían los arenes, reales o imaginarios, con los que tapan cada una de sus carencias y falta de sustancia con la cansadora, ya aburrida, estrategia convertida actividad masculina en arma letal, sumando o deshechando, mujeres como objetos de los cuales irremediablemente acaban presos del tedio coloidalmente....porque necesitan, no aman. Esa es parte de la paradoja en la que se encuentran muchos más de los que pensamos muy enredados y enredan a mujeres desfigurando cualquier afección. .. CM
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" El predominio de los hombres no tiene ningún fundamento"
La debilidad de la mujer es un mito, dice la antropóloga Françoise Héritier
La Nación, link
http://www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=906916
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La debilidad de la mujer es un mito, dice la antropóloga Françoise Héritier
La Nación, link
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