Echaba en falta un artículo que precisara las dificultades de la masculinidad para construirse. Ofrece un aire fresco que la rajadura del esquema empieza a dejar derramar el contenido de sustancias para ser vistas por sí mismos y por otros, para crearse de una vez por todas...me gusta que se afirme que ser un hombre no es fácil. Una de las frases más antiguas que guarda el hilo de infinidad de ritos de paso para convertirse...hoy cuál es el rito, dónde está la dificultad? No hay que pensarla mucho, las mujeres que somos sujetos les devolvemos a su dificultad. Sin temor ni pelos en la lengua, les ponemos en evidencia el desconocerse en la ineteracción como sujeto -sujeto.
Un lado, será el de la costilla? Aún permanece intacto por lo que destila para sí mismo y para el resto dificultad siempre pero no será eternamente. No obstante, cabe alegrarse, falta recorrer un largo camino en dirección a la ruptura del narcisismo casi primario de la masculinida. Pues les conduce, en muchos casos, desde la patología posesiva y que ahoga deformando el mundo a la ignorancia vestida de arrogancia despótica.
Hemos de celebrar mujeres y hombres que ya no sólo se trata de lavar los platos o no en muchos casos (a pesar de que persistan las tiranías domésticas) cuesta pero algunos han empezado a construirse como hombres. CM
Link Le Monde
http://www.lemonde.fr/web/article/0,1-0@2-3238,36-910283@51-903802,0.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario