Sumándome a esta convocatoria bloguera para expresar nuestra preocupación con el estado del medioambiente he agrupado algunos datos ilustrativos sobre la Amazonía. No porque en otras partes del mundo no ocurran los fenómenos desastrosos con el ambiente, los que causamos a nuestra casa, la Tierra…al contrario, la lista es interminable…sino porque hace mucho tiempo, más que antes que dieran los premios nobeles, que uno de los pulmones de la tierra más castigados, ignorado, desvirtuado, para desgracia de todos es la Amazonía. Desde la locura del Dorado, luego la fiebre del caucho y madereros, productores de arroz, los narcos, los petroleros, rutas fantasmas, cultivos intensivos, pagos a bancos, químicas y farmacéuticas … etc. etc. hasta sectas… que no fueron desapareciendo con el tiempo sino que se fueron sumando a todo lo dicho o turnando devastando su suelo, su paisaje, el hábitat y su gente.La Amazonía cautivó con la construcción imaginativa de que todo lo que es verde es fértil. Metáfora mortal de los superficial y lo que se ve sólo da la pauta, de no ir a las profundidades su tierra, a la complejidad de la realidad. La Amazonía es una de las más arcillosas, rocosas e infértiles del planeta ubicada sobre el escudo de Brasilia, formación geográfica antiquísima. Esto los pueblos indígenas lo saben. Conocen la delicadeza y fragilidad del suelo cuyos árboles son como millones de paraguas protectores del suelo que lo mantienen húmedo lanzando a la atmósfera oxígeno. Los indígenas para los cultivos rotan terrenos cada 20 o 30 años a veces, pero la economía de mercado y el cortoplacismo agota las tierras hasta convertirlas en desiertos.
Además ante magnífica fragilidad estos millones de árboles hacen el trabajo de respiradero del planeta. La cuenca amazónica arrastra con su río todo tipo de sedimentos y va cambiando su terreno continuamente. Así es que en un año una zona cercana al río puede inundarse, abrir un brazo y crear una isla con lo que se van fundando nuevos nichos ecológicos, nuevos mapas y configuraciones…es una zona que siempre se está haciendo a sí misma…
Todo ello desaparece con las actividades que exigen a los colonos el explotar el suelo d una forma que a la postre acaban abandonándolo por los impagos a los bancos.
Los indígenas y biólogos, geógrafos, sociólogos, antropólogos, ecólogos políticos, hace tiempo que llevan a cabo trabajos de investigación y de denuncia sobre este tema. Pero hay muchos sordos que no quieren oír. En otros casos muchos sí lo han hecho y han podido frenar estas perniciosas ingerencias que destruyen espacios geográficos y sociales. No olvidemos que allí la gente nos cuida el mundo.
A continuación figura un mapa del área amazónica y fotos en las que se pueden observar los árboles y los recorridos de distintos ríos amazónicos. Luego algunas fotos de distintos grupos indígenas que allí viven y para terminar links con información científica sobre este tema.
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