Algo que me atrajo de este art. es que desenmascara el acto alimentario actual. Pone en su lugar, y desprende el alimento de la banalidad, ventaja de la estupidez, señala avivados y , sobre todo, el vacío que sale, hasta el momento más álgido de este acto, comer con otros, con la ausencia de diálogo.
*
Millán, antropólogo especialista en comensalidad, afirma, con razón, que este instante de este acto, el de la comensalidad es un espejo sin ecuanom del grupo social que lo lleva a cabo.Y, Lévi- Strauss ,de como se la pone al desnudo con sólo verla comer, pues, es éste un lenguaje de los más arcaicos que el verbal.
*
El autor del art. nos cuenta como los baches conversacionales de un banquete de fuera de casa del actual circo culinario, lo remedia, tanto sea para que pase la comida como que sea para tapar el síntoma que sale sobre la mesa de las desvinculaciones del cada día. Palabra y alimento se tejen en la cena, desayuno, comida...bocata. Un indicativo de la alienación tales comportamientos?
*
El cierre del art. es grandioso, gracias a al cita de Groucho Marx,la que nos recuerda, con la sabiduría humorística, que un alimento es más rico si se lo comparte. CM
*El País
link
http://www.elpais.com/articulo/semana/arte/fogones/elpepuculbab/20080830elpbabese_3/Tes
No hay comentarios:
Publicar un comentario